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Tal Como Piensas, Vives…

Tu Biblia y la mía están llenas de tipologías y sombras que nos hablan que el corazón de Dios, era para ti. Ahora sal a la calle donde quiera que vivas, y dile al primero que se te cruce, crea o no crea, que todo lo que Dios hizo, lo hizo por ti…y también por él o ella. Pero díselo con la fuerza de la convicción y vas a ver el resultado de lo que el Espíritu Santo produce en una persona fría, incrédula, pecadora, impía y todo lo que se te ocurra. Si Dios va a conmover la iglesia, entonces prepárate para tiempos agitados. Escucha: si Jerusalén es el patrón de lo que verdaderamente va a acontecer en espíritu, entonces el proceso para que Jerusalén fuese edificada, es la edificación de la iglesia. Ahí tienes a todo el Antiguo Testamento para que lo enseñes y lo prediques. Todo está allí. David, Salomón, José, todos tratando de edificar y buscando algo.

Esos principios están relacionados con el tabernáculo y el templo, y la pregunta, entonces, es: ¿Por qué se preparó de esa manera? ¿Dónde va cada pieza? Todo tiene que ver con lo que queremos hoy para ser glorioso. Y si no continúas de acuerdo al patrón, nunca llega la gloria. Edifica de acuerdo al patrón y, entonces sí, llegará la Gloria. Él le dijo a Moisés: ¡Hazlo de acuerdo a lo que te mostré y yo lo llenaré con mi gloria! Si Jerusalén es el prototipo, entonces su construcción es el patrón. De hecho, lo que Dios va a conmover en ti, son principios. Formas de pensar, porque nosotros somos la iglesia. ¡Yo soy la iglesia! Removiendo todo lo que no es Dios, para que sólo permanezca lo que sí es Dios. La promesa es que te va a estremecer. El proceso es remover lo que se pueda mover. Y el propósito es que permanezca lo inconmovible. El propósito final, convertirnos en iglesia gloriosa, la ciudad de Jerusalén.

Pero… ¿Cómo lo va a hacer? ¿Cuántos de ustedes tienen una lavadora, un lavarropas o como quiera que se llame en tu tierra ese aparato donde pones la ropa sucia y en un rato te la lava, te la centrifuga y te la deja para tenderla al sol? A ver, piensa: ¿Qué hay en el centro de la lavadora? Un eje que gira y hace girar a toda la carga. En otros modelos, un tambor giratorio. Ahora bien; dice la Palabra que la iglesia genuina será sin mancha. ¿Qué se hace cuando se quiere sacar una mancha a la ropa? La mete en la lavadora. Y si la ropa tuya es como nuestra vida, imagínate los sacudones que vas a recibir hasta que salgan tus manchas. Si sientes que algo te agita y te conmueve y te remueve, es Dios, no el diablo. Él dijo que lo haría de ser necesario. Y ni hablemos del secado, porque eso te hará transpirar. ¿Será eso lo del fuego consumidor? Y luego, para finalizar, te quita las arrugas con una enorme plancha que te aplasta hasta que quedes liso y llano.

O sea que el material es la iglesia, las manchas son tu carácter. Por eso es que digo que nos va a conmover. Porque tiene que conmovernos, es la única manera. Nos está conmoviendo. Si se pasa de bueno no logrará que le prestemos atención. Ejemplo: ¿Cuándo ora más tiempo y con mayor fuerza un cristiano, cuando todas sus cosas andan a las mil maravillas o cuando tiene una hecatombe y todo se le derrumba? Sacudidos. Y que conste que cuando hablé de manchas, no me referí en ningún momento a esas manchas porfiadas y tercas que se resisten a abandonar la ropa. Una, dos, tres veces y las que sean necesarias deberás lavarlas. O salen las manchas o se deshilacha la ropa, no hay término medio. Ahora bien; con su misericordia, Él se proyecta desde la pandemia y comienza a remover naciones, reinos, ministerios, pero hace eso para mostrarnos a nosotros lo que es real y lo que sólo es temporal.

Y si la iglesia fuese un poquito más inteligente, ya hubiese aprendido qué es lo que va a permanecer y qué es lo que no va a permanecer. ¿Cuántos saben que esto que hasta hoy conocemos como la iglesia, no sólo no ha evidenciado ser inteligente, sino que más bien se ha mostrado terca, obcecada y en muchos casos, hasta necia lindando con lo torpe? Fíjate, cuando cayó el comunismo, aquel viejo muro y la Unión Soviética como jerarquía máxima de esa ideología, media América no supo qué hacer. Hasta libros enteros habían escrito autores cristianos, profetizando que el comunismo nos iba a tragar a todos y se iba a adueñar de la iglesia. Ese era el gran anticristo que nos iba a devorar. ¿Y ahora? Ahora es simple: la enseñanza para la iglesia, digan lo que digan los escépticos y etc., es que los sistemas del mundo no van a prevalecer. Si se cayó esa aparente mole roja indestructible que era el comunismo, se va a caer cualquier otra amenaza, por grande que parezca.

Hemos llegado a ser una generación que superamos lo que tenemos con algo mejor tan rápido, que no alcanzamos a hacer una pausa ‘para meditar en los sucesos que acontecen. No alcanzas a entender las aplicaciones que tiene tu teléfono, cuando ya te instaló cinco nuevas y vuelta a comenzar desde cero. Cuando Dios sacude, remueve y conmueve, no hay nada ni nadie que resista, sea quien sea y se llame como se llame. De hecho, de este lado de acá no está el dominio comprado de por vida, ¿Eh? Si somos obedientes al diseño, todo será bueno, pero si desobedecemos, nos caeremos como los demás.  Porque el principio básico del Reino, es obediencia. En la unción sacerdotal o carismática, existe la manifestación del perdón. En el principio del Reino, o la unción Real, el factor central es la obediencia. El Reino de Dios, es el dominio de Dios, sin embargo, es más sencillo recibir perdón que permiso.

Por eso hacemos lo que nos da la gana y después tenemos que salir corriendo a pedir perdón, en lugar de pedir permiso para lo que nos parece que deberíamos hacer. Tú, en tu mente, prefieres hacer lo que crees que tienes que hacer, y si fallas, pedir perdón. Eso, en lugar de ir a pedir permiso, porque sabes que te van a decir que no y a ti te está dando la gana que sí. No le hace, en este tiempo que llega, tanto los mensajes como la acción concreta, tendrán un común denominador: la obediencia. Y no estoy hablando de hombres ni jerarquías, estoy hablando de Aquel a quien le debemos toda nuestra obediencia, no a retazos, no solamente para lo que nos agrada, para todo lo que nos mande hacer, parezca bonito o peligroso. ¿Sabes qué? Hay algo que deberás saber hoy, porque mañana quizás sea tarde. Nunca dejes para mañana… ¿Recuerdas ese antiguo refrán? Esto.

No vivas en la misericordia de Dios, úsala cuando sea necesario. Más bien, trata de vivir en el poder de Dios. Hay veces que para saber qué es lo que está haciendo Dios, tienes que mirar al diablo, porque él obedece más rápido que los cristianos. Los reinos del mundo se están uniendo, y la iglesia no. Ellos decretan lo que nosotros deberíamos haber estado haciendo antes que ellos. Santiago nos dice que cuando venga la prueba, entonces van a salir a la luz las áreas que son y que no son de Dios. Además de todo esto, Dios para darnos luz, está conmoviendo las doctrinas y los mensajes. La falsa doctrina que es la religión y el legalismo, que, si tú no sabes exactamente que tu doctrina es falsa, entonces no la cambias. La mentira más grande que existe, es aquella que contiene al menos un punto de verdad. Y mucho peor todavía, si usa la Biblia como su texto básico. La secta más fea y más maldita que hay en el mundo, es la religión.

Muchas veces destruye familias enteras, en el nombre de un dios tan lejano que casi resulta imposible creer en él, y mucho menos servirlo u obedecer sus increíbles órdenes. Porque generalmente esas órdenes siempre benefician al líder y a sus allegados, pero para el resto nunca parece haber nada. Dios hoy está estremeciendo esos antiguos fundamentos. El avance de los tiempos me recuerda mucho a los terremotos graves. Cada vez que hay uno que produce desastres terribles, hay que cambiar el mapa. Dios también está estremeciendo la idolatría de las opiniones personales. Todavía queda mucha gente que fabrica doctrinas que luego obliga a cumplir y respetar a miles. Todavía no entendieron que la única palabra que no vuelve vacía cuando sale es la del Señor, no la de ellos. Minúsculas moléculas cargadas de incomprensible orgullo.

Ahora tenemos los principios del Reino predicados en la tierra, la restauración de la iglesia y el mensaje llamado “del Reino”. También tenemos bastante “verso”, como le llamamos en Argentina a los discursos sin sustento ni fundamento. Y también están los extremistas, que quieren que haya señorío de la iglesia en toda oficina y el reino político. ¡Mentiras! ¿Mentiras? ¡Sí, mentiras! ¿Por qué? Porque la Palabra dice que la cizaña y el trigo van a crecer juntos hasta el fin. La Luz y la tiniebla estarán juntas. Pero se va a manifestar una demostración, donde Dios pueda juzgar al mundo, porque nuestro sistema funciona mejor. El juicio viene de acuerdo a la justicia. Si hay cinco, Dios ya puede juzgar. La medida es la iglesia, no Satanás. Por esa razón es que la iglesia está siendo conmovida. Eso que ha hecho exteriormente, es para que tú te des cuenta que Dios es Soberano y todavía está trabajando.

Pero lo más curioso es que no vemos cuando opera en nosotros. Entonces nos quedamos soberanamente esperando una manifestación, cuando ella sólo viene a través de ti. ¿Vas a seguir mirando para arriba, esperando que caigan milagros del cielo que justamente van a bendecirte a ti? Ni lo sueñes, tendrás que clamar, orar, decretar, declarar y activar uno y cada uno de esos milagros. Porque Él es quien los hace, pero tú eres quien lo habilita. Él es la locomotora que arrasa con todo lo que se le cruza, pero tú eres quien pones las vías, los rieles por donde se mueve esa máquina. Con esto lo que intento decirte es que, lo que Dios quiere hacer en la tierra, lo va a hacer a través de ti. ¿Cuántos se acuerdan e la historia de Mateo 7, donde él hablaba de que había dos hombres y uno oyó lo que Él dijo e hizo lo que Él dijo, y Él lo comparó con el hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca?

Y entonces hubo otro hombre, que escuchó lo que Él dijo, pero no lo hizo y edificó su casa sobre la arena, y Él lo llamó un hombre insensato. Esta, que parece una parábola muy sencilla, sin embargo, encierra un principio muy importante, hay algo que no se ve. Las acciones de un individuo, son de acuerdo con su pensamiento. Porque lo que tú haces, es producto de lo que tú piensas. La forma que tú vives me dice a mí la forma en que tú piensas. No me dice nada de mi Dios, me dice dónde estás tú. Porque el principio siempre funciona. Pero el arrepentimiento es el principio. No lloriqueo lastimero, sino cambiar la manera de pensar. Alinearte con este misterio. Y por esa misma causa es que la iglesia todavía no avanza hacia el esplendor glorioso que tiene profetizado. Porque conforme al hombre piensa, el hombre es. Y mientras los hombres que conformamos la iglesia no cambiemos nuestra manera de pensar, será imposible cambiar nuestra manera de vivir. Y los resultados seguirán siendo los mismos. No se puede esperar que algo cambie y seguimos haciendo lo mismo que veníamos haciendo.

Ahora bien: ¿Qué dijo Él que ellos estaban dispuestos a escuchar y a obedecer? Dijo: entra por la puerta estrecha. Dijo: guárdate del falso profeta. Paréntesis: ¿Por qué falso profeta y no falso ninguno de los otros cuatro ministerios? Porque la palabra que se traduce como profeta, aquí, es vocero. Y esa le cabe a cualquiera de los cinco que vimos en Efesios 4:11. Él simplemente dijo: por sus frutos los vas a conocer. Dijo: todo árbol que da buen fruto y todo árbol que no da buen fruto, será cortado. Luego dijo: no todo el que me dice Señor, Señor, va a entrar. Y luego dijo: Y yo declarará a algunos que nunca los conocí. El que oye estas palabras y las hace, ese es el hombre prudente. ¿Quién te está sacudiendo? ¡Dios! Pero si no lo haces, se te cae la casa. O la piedra, que eres tú, La piedra viva se va opacando. La casa de Dios va a terminarse, con o sin ti. La diferencia, en todo caso es quien va a ser parte de esa casa.

La Palabra nos dice en Proverbios 23:7 que, según el pensamiento de su corazón, así tal es el hombre. Proverbios 19:21 dice Muchos pensamientos hay en el corazón del hombre; Mas el consejo de Jehová permanecerá.  Las ideas siempre terminan en consecuencia. Pero hay que aclarar que hubo una mentalidad que trajo una palabra llamada pragmatismo, y que esa mentalidad se ha infiltrado en la iglesia. ¿Y qué significa? Simplemente que, la raíz o la verdad de cualquier filosofía o significado de cualquier idea, es su función o el resultado práctico. Una boca llena. En otras palabras: el pragmatismo dice que el resultado de lo que yo pienso, está basado en mi conveniencia, no en la verdad. Los principios bíblicos son absolutos. Existen sin tu opinión. No necesitan de tu apoyo para ser ciertos. Los llamados “debates públicos”, salieron de la boca del Seol. Toman verdades absolutas y públicamente exponen opiniones, dando alternativa de acción al mundo, echándole agua a la verdad y desglosándola como opinión.

Sólo un problema: todas las opiniones son ciertas. Ponen una verdad que no debe ser debatida, una verdad que es absoluta, y entonces le piden la opinión a un sinnúmero de personas, y ahora hay un sinnúmero de personas, actuando de acuerdo con la opinión que ellos han escogido como la que estiman que es mejor. ¡La opinión no interesa cuando lo que se está debatiendo, es absoluto! ¿Tú todavía te estás creyendo esa enorme mentira desatada desde el infierno, que te asegura que el evangelio y Dios son aquello que tú estás viendo como evangelio y como Dios? Créelo si quieres, te hace feliz o te deja tranquilo, pero te puedo asegurar que nunca has estado tan lejos de la verdad como lo estás pensando así. Ahora tenemos una humanidad que hace lo que se siente bien, decide servir de acuerdo con su opinión, porque, al fin y al cabo, el doctor Fulano de Tal así opinó y su opinión es muy poderosa y valiosa.

Ese doctor está opinando conforme a lo que él cree que es Dios. ¡No me interesa! ¡Dios es Dios y no hay doctor que lo analice! – Néstor, una consulta…¿Usted cree que la Biblia es…? ¡No importa lo que yo crea! ¡No interesa lo que digan ciento cincuenta teólogos! ¡Dios es Soberano y hace lo que le da la gana, como le da la gana, el día que le da la gana y si le da la gana! Y tú y yo le creemos, le servimos y no lo cuestionamos. Eso es ser hijo. Todo lo demás, fraseología, jerarquía y posición religiosa. “Hermano… ¿Qué opinión tiene del aborto? ¡No me interesa opinar! Dios es el dador de la vida y nadie más tiene derecho a disponer sobre ella.

Si en la iglesia alguien medita sobre abortar o no, en función de cómo ello podrá beneficiarlo o perjudicarlo en su vida futura, está pecando. Así no aborte y tenga el niño, pecó igual porque no decidió tenerlo por obediencia y convicción, sino por conveniencia personal. Eso se llama pragmatismo y la iglesia se saturó de eso. La pregunta, es: ¿Está correcto o no? ¡No! No me interesa tu circunstancia. Dos hombres tentados en lujuria en la iglesia. Y uno piensa: si hago esto, pierdo todo lo que obtuve, o me puedo contagiar con una enfermedad venérea. ¡Pecaste! Tienes un pacto con tu mujer. Tienes un pacto con Dios. No voy a pecar ante el Altísimo y se acabó. No, no me voy a hacer ver con esa mujer en ese restaurant porque por ahí la gente piensa mal. ¡No! ¡No lo hagas porque no es correcto! Dios nos está sacudiendo, identifiquémonos.

Iglesias con el mega crecimiento. Oye…yo no quiero predicar esos mensajes fuertes y confrontativos porque no quiero que se me vaya la gente. Así que mejor predico algo suave, para que ninguno de mis diáconos se ofenda. Sobre todo, ese que es el más viejo en la iglesia. Este mensaje les gusta, no les pido que hagan nada ni que se comprometan con nada. Así se sienten bien y vuelven cada fin de semana. Creo que esa es la mejor manera de hacer crecer la iglesia. No me digas que nunca escuchaste decir algo así. No me digas que formaste parte de algo así. ¿Sabes qué? Pragmatismo satánico. ¡Qué es lo que está diciendo Dios, hoy, eso predica! Y que se vaya el que se tenga que ir. Y el que siga pensando que todo esto es demasiado fuerte o confrontativo, que se fije lo que está predicando, porque este es el evangelio de la cruz, y ese evangelio no es precisamente una monada para compartir a la hora de tomar el té. Si tu mensaje no ofende, no es el mensaje de la cruz. El mensaje de la cruz podrá ofender, pero edifica.

Dios nunca revela lo negativo sin traer la solución. Sino es carne, es hombre y Satanás, no es Dios. Dios sólo revela lo negativo para introducir lo positivo. Nunca te deja a mitad de camino. Pero el mensaje de la Biblia es de confrontación. Cristo dijo: yo no vine a traer paz, vine a traer una espada. ¿Cuántos saben que donde quiera que él fue, hubo confrontación? A veces, incluso, la buscaba. Hay dos clases de dadores en la iglesia. Uno que siempre está buscando reembolso por su motivación. Piensa algo así como: “A ver qué puedo sacar para mí en esto”. Sigue siendo pragmatismo. Perdiste tu bendición. Hay naciones que no tienen lo que aquí conocemos como impuestos y que no reciben nada a fin de año por sus dádivas. Yo me pregunto: ¿Cómo sería la situación de la iglesia en América si fuera absolutamente libre y voluntario diezmar u ofrendar? Sonríe, sólo necesitas mover 17 músculos para hacerlo. En cambio, para poner esa cara de piedra te lleva el doble, 34…

¿Tú quieres que tus hijos crezcan combatiendo este tipo de espíritu? Entonces enséñale a que nunca mienta. Te convenga o no te convenga, jamás mientas. Aunque decir la verdad te haga ir preso, no mientas. ¡Es que si digo eso me van a meter preso! Si no lo dices vas a ser fugitivo y de paso también maldito por Dios. “¡Es que no, hermano, mi intención siempre fue la mejor! ¡Sólo que salí de mi casa y justo pasaba alguien vendiendo un teléfono celular última generación a un precio promocional de cien dólares! ¡Yo sólo aproveché la oferta, no hice nada malo!” No seas cabezón ni hipócrita. Tú sabes muy bien que nadie te va a vender un teléfono de esos a cien dólares a menos que sea robado. Eso también es pragmatismo. Y con ramificaciones de delito. La otra: el muchacho compró algo y lo pagó con un billete de diez y le dieron el vuelto de un billete de veinte. ¡¡Aleluya!! ¡¡Dios me está bendiciendo!!

Sacúdete. Si no quieres hacerlo, Dios vendrá y te sacudirá Él. Hay métodos humanos que no tienen parte en el Reino. Todo el mundo viene a recibir a la iglesia. ¿Qué pasó con el salmo 24, que dice que la tierra es de Jehová? ¿Cuántos son mayordomos de la tierra? Es que el gobierno no se ocupa de limpiar la ciudad. Hazlo tú, eres iglesia, eres gobierno. ¿Quieres encontrar buenos líderes? Utiliza a todos los que veas arrojar su basura en los cestos preparados para eso y no en la calle. ¡Es que hay demasiada injusticia en este mundo! Aumenta la Justicia, entonces, eres un embajador de un Dios Justo. ¡Es fácil decirlo, pero hacerlo…! Funciona. ¡Es que yo jamás pensé así! Lo sé, arrepiéntete. Eso es lo que debemos hacer, porque si nosotros no lo hacemos, Dios nos va a estremecer junto con ellos.

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febrero 26, 2023 Néstor Martínez