Que los cristianos no siempre tienen en claro la validez o significado de las palabras que utilizan cada domingo, es una realidad. Comenzando desde el legendario, clásico y tradicional “amén”, del cual apenas un veinte por ciento sabe su significado. El resto, lo usa a diestra y siniestra aunque en algunos de esos casos, sea una contradicción. También sabemos que las palabras atan o desatan, conforme a su significado y momento. Y que hay otras que tienen esencia de eternidad a tal grado que solamente la Biblia puede usarlas sin cometer errores.
Estos audios de estudio me ayudan.