El Tiempo del Séptimo Ángel

Hay una verdad y ha sido dicha: la manifestación de Cristo depende de remover algunas cosas en la iglesia, no de pedirle más a Dios. La entrada a Canaán dependía de desposar la tierra, no de cargar con los asuntos de ella. Lo que mantuvo al pueblo muerto y viajando en el desierto, era el temor a sí mismos, porque ellos se veían como tristes pecadores por gracia. Como langostines.

 Caleb tenía otro espíritu; había nacido de nuevo, en tipología. Su naturaleza mental era diferente. Haya este sentir en vosotros, dijo Pablo. Él pensaba diferente. Decía: ¡Sí podemos! Si Él lo dijo, yo lo creo y ya está. ¡No! Le decían; ¡Pero es que hay gigantes!

Todo Israel andaba haciendo la misma rutina cuando Goliat. Había más gigantes en la tierra cuando Goliat. Goliat es al único que la Biblia menciona, pero había más. Pero ese cambió porque tenía las seis piezas, los seis dedos y los seis codos de estatura.

1 Juan 2:18 dice que muchos anticristos ya salieron de nosotros. 1 Juan 4:3 agrega que salió y vino de nosotros. Es el anticristo. Y le dice luego el por qué. 2 Tesalonicenses 2:11, dice: Por eso Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira, (12) a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la verdad, sino que se compadecieron en la injusticia.

 ¡Uno les dice la verdad y no la quieren creer! Se mantienen en engaño. Fíjate que Pablo está hablando del día del Señor y está peleando con lo mismo. La iglesia andaba sacrificando cuando ya estaban en la Gracia. Está diciendo; Adán murió, ¿Qué haces?

Este es el problema que yo tengo: si tu teología termina en Jerusalén, con un pueblo que Dios ama, el judío, haciendo cosas sin la presencia de la iglesia porque ya nos fuimos; sin la presencia del Espíritu Santo, porque también se fue con la iglesia., algo no encaja.

 Una nación pequeña porque son sólo un puñado de gente, comparado con el cuerpo de Cristo que ya se fue; si nosotros terminamos en una teología que dice que ellos, sin el Espíritu Santo, sin la iglesia, y por medio de la sangre de machos cabríos, van a salvar más gente que nosotros, con el Espíritu y con la sangre del Cordero, entonces tú me estás diciendo a mí que la sangre de machos cabríos salva más gente que la sangre de Jesús!

La cuestión de fondo aparece en el libro del Apocalipsis, al que ya hemos entendido como LA revelación de Cristo y no LAS revelaciones de Él. Lo más importante de todo esto es que si Cristo necesitaba ser revelado, significa que andaba escondido en alguna parte, no por voluntad propia, sino que es un proceso.

También hemos visto que Cristo es la esperanza de gloria. Cristo en nosotros, la esperanza de gloria. Es el misterio escondido que Pablo tuvo la bendición de revelar a los gentiles, el cual es Cristo en nosotros la esperanza de gloria.

Quedó dicho que Cristo está siendo formado en ti y la idea de ser formado no es que Él necesita formación, – Él ya está -, Y cuando digo “Él”, no se lo digo a un cuerpo, a una silueta dentro tuyo, sino a la esencia, a la naturaleza, aquello que es cierto de la vid, es cierto de los pámpanos.

 Porque la vida de los pámpanos es la misma vida del tronco o del tallo de la planta. Es decir que: lo que hace que Cristo sea algo que existe, es lo mismo que hace que tú también existas. La sustancia que hace que Él sea lo que es, es la misma sustancia que te hace a ti lo que eres.

El problema es que la iglesia piensa que Cristo es algo inalcanzable para a ellos. Y yo le estoy enseñando que el destino de la iglesia es reflejar la plenitud de Él porque ya la traemos. Es cuestión de que hay un velo que la esconde. Entonces la revelación de Cristo es correr el velo por medio de quitar cosas que impidan su visibilidad.

(2 Tesalonicenses 2: 1)= Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo, y nuestra reunión con él, os rogamos, hermanos, (2) que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, en el sentido de que el día del señor está cerca. 

(3) Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición.

Ya hemos dicho que Romanos 5:12 nos dice que El pecado entró al mundo por un hombre. Todos sabemos  que ese hombre es Adán. Sería lógico, entonces, que si hay un hombre en la tierra que lleve el título del Hombre de Pecado, ese sea aquel que lo inició.

Ya eso le quita el problema a cualquier dictadorcillo de la tierra y se lo coloca a Adán. La Biblia se tiene que interpretar con la Biblia. El comentario apoya la Biblia si la confirma. Si no la confirma, tú la estás cambiando. La Biblia dice que el pecado entró por un hombre. Pero entró desde el principio de los tiempos, no entró ahora. Este es el resultado del pecado.

Claro que hay mucha manifestación adámica. Hay unos que tienen más plenitud de esa mentalidad que otros. Y se ponen un poco más viciosos en sus comportamientos. Al igual que hay algunos en la iglesia que exhiben más de Dios que otros.

Hay algunos tan apasionados por Dios, como hay algunos tan apasionados por aquello que es contrario a Dios. Y hay distintos niveles de expresión. Por eso Juan dice: Muchos anticristos han venido ya.

Pero el anticristo o los muchos anticristos, son diversas expresiones de la mentalidad adámica. De gente que juzga entre el bien y el mal sin considerar los principios de Dios, como aquello que gobierne sus decisiones.

El hombre de pecado, el hijo de perdición, es la naturaleza adámica. Nosotros ya no tenemos ese problema en el espíritu, pero sí sabemos que nuestra mente fue programada de afuera hacia adentro.

 Una vez que Adán cayó, el alma se sensualizó con el cuerpo. De manera que recibimos todas nuestras impresiones desde el exterior. El alma, entonces, a través de las emociones, nos dicta qué hacer con el cuerpo.

 Estábamos destituidos de la presencia de Dios. La Biblia llama a eso: Cuando estabais muertos a vuestros pecados. Pecado, allí, es la palabra AMARTIAS y significa que tú no estás dando en el blanco, no que tú seas un delincuente.

 Aunque esa puede ser una expresión de tu naturaleza. Tú puedes ser el mejor ciudadano del mundo y aún puedes estar muerto en pecado. Pecado no significa necesariamente hacer cosas malas. Pecado es una naturaleza.

 Tú no eres pecador cuando pecas, tú pecas porque ya eres pecador. Naciste pecador. ¡Pero un niño no puede tener culpa! No tiene nada que ver con la culpa; tiene que ver con naturaleza. Por eso el niño ya nace pecador.

Por eso tú no te debes sentir todo redargüido cuando hay errores de esa naturaleza en un pecador. Estás haciendo lo lógico; el árbol produce según su especie. Un árbol malo no puede, por ejemplo, producir buen fruto.

 Es más; nos debemos asombrar cuando una persona no salva, tiene buenos frutos. Claro; sus buenos frutos lo son según su juicio, lo cual es egocentrismo y siguen siendo paños sucios delante del Señor; por eso todos necesitamos al rey.

(2 Tesalonicenses 2: 4)= El cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios, haciéndose pasar por Dios.

La palabra TEMPLO, aquí, tal como alguna vez lo enseñamos, es la palabra NAOS, y significa “Una morada interna, una morada espiritual”. Está hablando del cuerpo del hombre, en oposición a lo que es la palabra HIERON, que significa “estructura física”.

Cuando Cristo dijo: destruye este templo, yo voy a levantarlo en tres días, Él habló de aquel siendo HIERON y de este siendo NAOS. Cuando Él entró en el HIERON, Él desparramó las mesas. Esa fue una estructura física.

En el Libro de los Hechos de los Apóstoles, que en realidad debería haber sido llamado “Hechos del Espíritu Santo”, dice que perseveraban día a día en el HIERON de Dios y comían y hacían comunión en las casas. Es una estructura física.

Pero luego vemos en Efesios 2:20-21, que estamos siendo edificados como templo, como morada y, en ambas palabras, dice NAOS. Esto es algo espiritual y tiene que ver con el hombre. 1 Corintios 3:16 también nos dice que si no sabemos que somos el NAOS de Dios, una vez más NAOS, es un templo interior, una morada que Dios quiere edificar para habitar.

 Tenemos sus arras. Pero Él quiere, no una visitación evangelística. No una visitación de un avivamiento. Él quiere hacer una morada eterna. Como máximo un avivamiento, sólo trae un viento de Dios; trae sus manos, no su presencia. Tenemos que cambiar nuestro vocabulario.

¡Estaba la presencia de Dios! Perdón. Cuando tengamos su presencia, el mundo entero lo va a saber. No la iglesia, el mundo. Si Dios estuviera aquí, en presencia, el mundo se enteraría. No solamente la iglesia que anda en avivamiento.

Y en Apocalipsis usa esa palabra, NAOS. Es decir que aquello que se llama “hombre de pecado”, tiende a quererse sentar en el NAOS de Dios. Es lo mismo que dijo Satanás: “Quiero subir sobre las nubes”.

Y ya sabemos que las nubes no se refieren a nubes literales. Tú puedes leer gramaticalmente, y decidir que habla de nubes literales. Pero cuando es una analogía, siempre se refiere al hombre.

Por eso Judas dice que hay nubes sin agua que son manchas en nuestros ágapes. Obreros fraudulentos. ¿Sabes lo que es un obrero fraudulento, verdad? Dos veces árboles otoñales arrancados. No tienen agua. El agua es la palabra de Dios.

Dice que él se quiere sentar. Sólo que al presente hay algo que lo detiene. Vamos a ver qué es lo que lo detiene. Entiende esto: tú puedes predicar el mismo verso que yo de mil y una maneras, y lo podemos ver de veinte mil formas. Pero yo sigo buscando, – y te recuerdo que no estoy estableciendo ninguna doctrina -, la revelación de Jesucristo.

Es decir que tú puedes volver a Apocalipsis, si quieres, y ver otras aplicaciones que van más allá de esto. Esto sólo es parte. Todos conocemos en parte. Yo estoy cumpliendo y ayudando con la parte que conozco.

Vamos a ver si lo que sigue tú lo entiendes como yo lo he entendido. Hay cosas que uno entiende en su espíritu, que a veces no encuentra palabras para expresar o trasladar al pueblo. A veces se siente como que no damos lo suficiente como para que se nos entienda.

(Apocalipsis 10: 7)= Sino que en los días de la voz del séptimo ángel, Nota, por favor, que las trompetas son doce, cuando él comience a tocar la trompeta, Tú ya sabes que la trompeta es el mensaje, el misterio de Dios se consumará. ¿Qué misterio? El que Pablo dijo, que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria como él anunció a sus siervos los profetas.

Cuando lleguen los días del séptimo ángel, es que el misterio se consuma. Entiende que Cristo lo dijo de esta manera cuando lo dijo en la parábola de Mateo. Él dijo: Un hombre tenía un campo y sembró una buena semilla, y entonces vinieron los hijos del malo y sembraron otro asunto en el campo.

Los apóstoles dijeron: ¿Sabes qué? Si tú no sembraste todo esto, entonces vamos a arrancarlo, si? No. No pueden, dijo Cristo. Son tan parecidos… Anota por allí donde lo tengas siempre cerca de tu vista: Lo malo es muy parecido, no diferente. Esto significa que el peor enemigo, casi se parece a ti. Es decir: también lleva debajo de su brazo una Biblia. Está en el mismo campo.

Él dijo: déjalos que crezcan juntos, y cuando llegue el tiempo de la siega… El tiempo de la siega es identificado con madurez. Porque tú no cosechas frutos hasta que no están maduros. Verdes no los quiere. Entonces el tiempo se está deteniendo…

 ¿Qué tiempo? El tiempo de la madurez. Porque hasta que tú no estés maduro, no se va a hacer evidente aquello que es adámico. Porque mientras tú no estés maduro, tanto el adámico como tú, parecen una misma iglesia, cuando en verdad hay dos iglesias en el mismo campo.

(Apocalipsis 10: 4)= Cuando los siete truenos hubieron emitido sus voces, yo iba a escribir; pero oí una voz del cielo que me decía: sella las cosas que los siete truenos han dicho, y no las escribas. 

(5) Y el ángel que vi en pie sobre el mar y sobre la tierra, levantó su mano al cielo, (6) y juró por el que vive por los siglos de los siglos, que creó el cielo y las cosas que están en él, y la tierra y las cosas que están en ella, y el mar y las cosas que están en él, que el tiempo no sería más. 

¿Qué tiempo? El tiempo en que venga el séptimo ángel, el tiempo del séptimo ángel es el tiempo del séptimo mes, el tiempo de la fiesta de los tabernáculos. Es cuando hay un mensaje claro. El séptimo ángel trae un mensaje claro.

 Tras el entendimiento que te termino de completar, en ti ya está la madurez que ya tienes. Y entonces se empieza a ver claramente quién es quien. Allí hay una apostasía que, dice Tesalonicenses, no es salirse del evangelio, sino andar tú y yo juntos en ciertos niveles de verdad, y cuando la verdad acumulada va creciendo y tú comienzas a sentir la presión del grupo y el compromiso con la política religiosa. 

Tú comienzas a sentir la presión de la pérdida de tu reputación, por causa de lo que muchos podrían considerar como herejía y tú apostatas una fe anterior. Es decir: se retracta adonde está cómodo y no le pone presión hacia ti.

 Eso era lo que pasaba en Apocalipsis cuando dijo: Pero yo tengo algunas cosas contigo; tú mantuviste tu fe, aún cuando mataron a Antipas. Antipas era un apóstol. Dice: tengo algunas cosas: tú vives en el epicentro, vives en el trono de Satanás, y mantuviste tu fe, aún cuando mataron a Antipas. Antipas era un apóstol. Es decir: el epicentro es satánico, las armas más poderosas que tienen, son las de eliminar las verdaderas voces.

Satanás no es omnipresente. La Biblia dice, en Apocalipsis, que había una iglesia que vivía en el trono de Satanás. Yo me imagino que el arma más poderosa utilizada por Satanás, tiene que estar concentrada en el epicentro. En su trono.

Allí es donde tiene que estar lo peor. Cuando tú lees en contexto, lo que menciona que hace Satanás como lo más alto, es falsa doctrina y eliminar los padres de la iglesia. Los intercambiamos por superintendentes y títulos. A lo sumo nos podemos llamar igual, pero no funciona igual.

Entonces el tiempo ya no lo va a detener, porque cuando llega el tiempo de madurez se hace evidente quién es quién. Entonces, dice la misma parábola en Mateo: Entonces, en el tiempo de la siega, Cristo enviará a sus ángeles.

No los de Dios, sino los de Él. Los ángeles de Cristo son mensajeros, son hombres. Y meterán la hoz, La hoz es una palabra de dos filos, dice Hebreos 4:12 y segarán primero la cizaña.

 Y luego explica que la cizaña son gente que sirve de tropiezo, gente que trae una palabra falsa, un alimento contaminado que sólo se descubre con la palabra auténtica, genuina. De allí que al final, dice: Entonces los hijos del Padre, los justos, reinarán en el reino de su Padre y serán vistos. Es decir que: no se puede ver la verdad hasta que no se saca la mentira. Y la mentira se saca por medio de una palabra de verdad.

Por eso dice: la espada de su boca. Lo dice Tesalonicenses, que el inicuo va a ser consumido con el soplo de su boca, pero resulta ser que a su boca, la tiene la iglesia. Porque Él oyó una voz y, cuando se volvió hacia tras para ver la voz que le hablaba, no vio a Cristo, vio al candelero.

Y el candelero, muy bien lo sabemos, es la iglesia. Esto implica que la voz de Cristo estaba saliendo a través de la iglesia. Es que hoy, la expresión ejecutiva, el cuerpo activo de Cristo, es la iglesia. Él es la cabeza y nosotros su expresión.

Después dice que ya está en acción el misterio de la iniquidad. No te olvides que iniquidad es algo que está en nosotros. Entonces, las tentaciones que existen por presiones de grupo, extraen de nosotros aquello que hay que extraer para que Él sea visto.

 Es algo que trabaja para Dios. Porque si no hay tentaciones ni presiones, eso que está inerte en nosotros y que quedó allí porque fue programado por Adán, no se puede manifestar y salir. Hay veces que a nosotros nos pueden gustar cosas que no estamos ni enterados que nos gustan. Y no sabemos que están allí hasta que no somos tentados con ellas. Dios no te tienta a ti. Es tu propia concupiscencia, lo que tú traes dentro es lo que te hace hacerlo.

Tenemos que salir de la mentalidad de esta parte del hemisferio americano. La iglesia es global y es mucho más grande que América o cualquier lugar donde se la quiera mostrar grande. América es sólo un punto dentro de la iglesia global.

 Claro que la iglesia de América, por causa del dinero, ha influenciado muchísimo a partir de los medios de comunicación. Pero la expresión que tú has podido entender por todos esos medios, no limita a la iglesia de Dios a esas expresiones.

 Es más: es una expresión muy pobre con relación a lo que la verdadera iglesia es hoy. El problema es que la gente que trae una mejor expresión, no es la que está en la televisión para que tú la veas. ¡Hay una iglesia dentro de la iglesia! Pero Babilonia va a caer. Mejor dicho: Babilonia está cayendo.

Dice que porque ya está en acción el misterio de la iniquidad, sólo hay quien al presente lo detiene, que es el tiempo de la madurez, hasta que Él, hasta que Él, no LA iglesia, se vayan. Hasta que Él hombre de pecado sea quitado de en medio. Así lo dice Tesalonicenses 2:7. Nota que es un pronombre personal de una manera masculina.

Allí también dice que Judas fue la expresión del hombre de pecado en aquel momento. ¿Por qué? Porque no entendió que la muerte de Cristo era la muerte de él. Y aunque Cristo había colgado de un madero, él fue también y se colgó.

Mucha de la gente, hoy, en las congregaciones, anda colgándose a sí misma olvidando y despreciando al que fue colgado por ellos. Anda tratando de alcanzar por obras, lo que Cristo ya alcanzó.

 ¡Ah! ¡Si yo pudiera ayunar un poco más! ¡Si yo pudiera no faltar ni un solo domingo al culto! ¡Si yo pudiera no condenarme por no haber orado esta mañana! Si la obra de Dios dependiera de ti, no haríamos nada. ¿Cuántos les dan gracias a Dios por que eso no depende de nosotros? Dios va a hacer esto con o sin ti.  Siempre va a haber una gente que va a ser obediente.

Una de las cosas que vamos a tener que cambiar en la iglesia, es nuestro vocabulario. Por ejemplo: nosotros, cuando vemos que hay gente que acepta a Cristo, que acepta el camino del Señor, decimos que se han salvado almas. Muy bien; vamos a ver ahora, como, a pesar de ti ser salvo, hay una serie de aspectos que son progresivos.

(Santiago 1: 21)= Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada,Esto te está diciendo cómo se debe recibir la palabra.

La palabra se recibe desde una postura espiritual que está lista para obedecerla. No se puede agregar algo a algo que ya está lleno. Si tú escuchas o lees esto para juzgar mi doctrina, tú no recibes nada.

 Pero si tú recibes la palabra con mansedumbre, quizás hasta puedas ver que algunas de las cosas que aprendiste no eran tan así. Y dice que de ese modo debemos recibir la palabra implantada. No una predicada.

Estamos hablando de impartición, de una palabra que viene con una autoridad y un gobierno que te llega directamente el espíritu. No lo entiendes tú ahora, pero terminas de escuchar o leer y sabes que Dios habló. la cual puede salvar vuestras almas.

Nota claramente que si tú eres salvo y todavía la palabra es la que salva tu alma, entonces no fue tu alma la que se salvó cuando tú naciste de nuevo. Tu espíritu fue vivificado por Dios. Fueron levantados en el hombre exterior y fueron sentados en lugares celestiales.

 Pero tu alma sabe que lo que Adán le enseñó. ¿Por qué no cambia? ¡Se convirtió! Hay gente que inmediatamente tiene todo el milagro de una liberación. ¡Hay gente que no! Debemos ser pacientes como es Dios con nosotros.

¿Tú sabías que la única que condena al mundo es la iglesia? Dios no lo condena. Él ya lo perdonó. Dice que Él no está considerando nada en cuanto a lo de ellos. El único juicio que resta para con el mundo, es aquel que señala: “¿Por qué no aceptaste aquello que hice por ti?”

 Porque por todo lo otro, ya fueron juzgados, fueron hallados culpables, porque Él atrajo a todo hombre a la cruz y allí fuimos clavados todos. ¡Es que a mi me enseñaron…! Hablo de la Biblia mi amigo, no de doctrinas. La palabra es buena para doctrina, pero la palabra no es doctrina. Tú puedes usar a la palabra para crear doctrina, pero la palabra es una persona, no un libro.

(1 Pedro 1: 9)= Obteniendo el fin de vuestra fe, que es la salvación de vuestras almas.

Nota, entonces, que el fin de tu fe es salvar tu alma, no el comienzo de tu fe. El fin de tu fe, es un alma salva. Estamos simplemente corrigiendo terminologías. Porque si no entendemos como fue escrita la Biblia, no vamos a poder entender lo que la Biblia dice.

 Estamos dejando que la Biblia se interprete a sí misma. Por eso leemos que la salvación es progresiva. Es de tres tiempos: Atrio, Lugar Santo y Lugar Santísimo. A Juan se le dijo: Escribe las cosas que fueron, las que son y las que han de ser después de estas.

 Los sellos, las trompetas y las capas. El 30, el 60 y el 100. Padre, Hijo y Espíritu Santo. Toda la Biblia está dividida en tres. Es la forma en que Apocalipsis también está dividido. Capítulos 1 al 5, el Atrio; 6 y 7, Tiempo de la Iglesia y, del 8 al 22, Tabernáculo.

La mayor parte del libro se desarrolla desde el trono de Dios, rodeado por unos seres llamados Querubines. La palabra Querubín, en la Biblia y en cualquier diccionario, significa: “Seres imaginarios que representan los atributos de Dios”.

 Por eso hay un Querubín en el Edén. ¿Por qué? Porque el Edén no es para gente caída, sino para gente con la plenitud de los atributos de Dios. Entonces, ese es el letrero que dice que el Edén o la morada de Dios son sólo encontrados en hombres con sus atributos.

 Es por eso que en los capítulos 4 y 5 de Apocalipsis, tú los ves cantando. Están diciendo: Santo, santo, santo, nos ha redimido y nos ha hecho reyes y sacerdotes y reinaremos en la tierra. La iglesia, sin embargo, le está cantando a los Querubines.

Por eso digo que todo el, libro de Apocalipsis desde el capítulo 7 en adelante, es un mensaje que se desata del trono de Dios el cual es el corazón del hombre, quien tiene los atributos de Dios como expresión de la revelación de Cristo en la tierra. Que termina en Apocalipsis 22, con Dios haciendo Tabernáculo con los hombres. El Cordero ilumina la ciudad de Dios. No hace falta un templo, porque la iglesia es el templo.

¿Cuántos entienden esto? ¡Si, entendemos…! Lo que pasa es que los gigantes empiezan a pelear… Al alma, la palabra la usa como femenino. En el salmo 34 se la compara con Eva y Adán. A menos que no haya intimidad entre ellos, no se produce un hijo.

 Entonces la intimidad de la manifestación del hijo maduro de Dios, en la tierra, depende de qué tan unida esté tu alma con tu espíritu. Porque mientras tu alma está separada y dictándole órdenes al cuerpo, porque así vivíamos antes de ser salvos; las impresiones las recibíamos con los cinco sentidos, entonces reaccionábamos en vez de accionar.

De acuerdo con nuestras emociones, así actuábamos. Pero cuando nuestra alma está sujeta a nuestro espíritu, entonces hay una concepción, y el Espíritu puede engendrar y el alma es el vientre que produce el hijo o la expresión que estamos buscando.

(2 Corintios 11: 3)= Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo. Aquí vemos a Eva comparada con la mente y los sentidos, que como todos sabemos, se albergan en el alma y el cuerpo.

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enero 1, 2015 Néstor Martínez