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Entendiendo el Mal

La importancia de este estudio, no es por razones de doctrina, sino para ayudarnos a entender nuestra posición en medio de toda la hostilidad que este mundo tangible nos trae.  Si Satanás es quien hemos creído que es, entonces nos enfrentamos a una sutil guerra mental que se lleva a cabo en nuestro inconsciente. De hecho, hemos formado una idea eclesiástica, doctrinal y personal de Satanás que muy rara vez tiene que ver con lo que encontramos sobre él en la Biblia. Eso no sería contraproducente si no se tratara de quien se trata. Al creer que Satanás es el enemigo de Dios, lo estamos situando en la misma clase de ser que es Dios, creándonos un concepto de él de segundo creador que no existe.

Si creemos que Dios creó a Lucero o Lucifer bueno y perfecto, y que después le fue encontrada iniquidad; en realidad estamos diciendo que Dios perdió a un ser creado perfecto que debió haber sido tentado o seducido por otra criatura desconocida. Si este es nuestro concepto entonces al enemigo lo vemos como a alguien con un poder ilimitado y pervertido (aún en su posición de caída). Muchos de nosotros tendemos inconscientemente a verlo como superior en jerarquía, y esto nos lleva a pensar en medio de toda nuestra práctica de guerra espiritual, que en verdad no podemos destruir sus obras debido a nuestra falta de fe producida por el concepto inconsciente que tenemos de él.  Este concepto no es enseñado por nuestra doctrina, pero es producido por ella.

Hay bastante claridad en esto, sobre todo en esto último que te dije. ¿Por qué nuestras doctrinas (Y empleo el plural porque todos sabemos que dentro del pueblo evangélico hay más de una), producen esa creencia errónea? Quizás ustedes quienes hoy están escuchando esto, tengan otra idea o interpretación de lo mismo; y tal vez no sea ni descabellada ni equivocada, sino anexa. Pero lo que yo creo, es que ante la ausencia de Presencia y Poder de Dios en nuestras congregaciones, y por consecuencia en nuestras vidas, resulta más cómodo y conveniente cargarle la culpa al “tremendo” Satanás de todo lo malo que nos pasa, que cargarlo a nuestras incredulidades vernáculas…

Ahora, al entender quien es Satanás, inmediatamente nos vemos a nosotros mismos en una posición dada por Dios que no puede ser obstruida por sus maquinaciones. Esta posición de autoridad sobre él, no surge por enseñar autoridad al creyente en Cristo, sino por la naturaleza de haber sido creados por encima de él desde el principio de los tiempos.  Satanás nunca ha sido un ser superior al hombre y nunca lo será.  Cristo simplemente abrió nuestros ojos a este principio eterno o verdad, por lo que puso nuestro auto concepto por encima de los principados y potestades. Y si esto es así, ¿por qué el mal? Esta es una pregunta que, no tengo dudas, se deben haber formulado a sí mismos la mayoría de quienes me están escuchando. ¿Tiene respuesta?

Sí, aunque no la entendamos o nos resulte antipática. Para que Dios pudiera cumplir Su plan tuvo que crear el mal. Digamos que, si tú entras a un templo y dices algo así, lo primero que puede ocurrirte es que alguien te muestre los dientes fieramente, y lo segundo, que te saquen a empellones o llamen al ministro de liberación para que te saque los demonios que seguramente tienes. Sin embargo, me tomo el trabajo de buscar y escribir los textos que los autores solamente citaban para que no se te pierda nada. Si bien estoy en una etapa donde cada vez recurro menos a reproducir capítulos y versículos, porque entiendo que ya te conoces muy bien la Biblia, en este caso lo haré para echar fuera cualquier duda santa.

(Génesis 3: 1) = Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que Jehová Dios había hecho; (Dios hizo a la serpiente astuta) la cual dijo a la mujer: ¿Con que Dios os ha dicho: no comáis de todo árbol del huerto?

(Isaías 45: 5-7) = Yo soy Jehová, y ninguno más hay; no hay Dios fuera de mi. Yo te ceñiré, aunque tú no me conociste, para que se sepa desde el nacimiento del sol, y hasta donde se pone, que no hay más que yo; yo Jehová, y ninguno más que yo, que formo la luz y creo las tinieblas, (Dios creó las tinieblas), que hago la paz y creo la adversidad. (Dios creó la adversidad). Yo Jehová soy el que hago todo esto.

(Amos 3: 6) = ¿Se tocará la trompeta en la ciudad, y no se alborotará el pueblo? ¿Habrá algún mal en la ciudad, el cual Jehová no haya hecho? (Si no se entiende mal, es Dios quien creó también el mal. Todas las versiones que conozco, coinciden.) (Proverbios 16: 4) = Todas las cosas ha hecho Jehová para sí mismo, y aún al impío para el día malo. (Es decir: Dios hizo al impío)

Colosenses 1: 15-17) = Él (Cristo) es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles, sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten. (En suma: todas las cosas fueron creadas en Cristo. Y si dice todas, eso significa: todas.)

(Isaías 54: 16)= He aquí que yo hice al herrero que sopla las ascuas en el fuego, y que saca la herramienta para su obra; y yo he creado al destruidor para destruir. (Si tenemos en cuenta que, en otros textos, Satanás es llamado “el destructor”, entonces está claro que es Dios quien creó a Satanás).

Lo que motivo todo esto, fue Su plan de crear un Hombre a Su imagen.  Y la única manera de alcanzar este propósito, es a través de mostrarse y revelarse a sí mismo al hombre que Él formó del polvo de la tierra.  Dios no es un ser creado, por lo que no podía crear simplemente a una imagen y llamarlo igual a Su naturaleza sin crear un proceso de alternativas de las cuales Su creación escogiera, y a razón de sus elecciones se convierta en la meta y objetivo esperado. El hombre no pudo ni podía hacer nada de esto en ningún modo, por eso Dios lo hizo todo desde la fundación del mundo. Sé que no resulta sencillo de entender con tu mente, por eso aspiro a que me estés oyendo con tu espíritu.

Nos cuesta mucho entender esto. Y no es ilógico que así sea, ya que somos portadores y propietarios temporarios de una mente finita, esto es: una mente que nace, crece, se desarrolla y muere, mientras que estos conceptos pertenecen a una mente infinita o eterna. Y si hay algo que al hombre le cuesta horrores entender, ese algo es la eternidad. Por eso se debe limitar, cuando no puede entender, sencilla y simplemente a creer. Con eso basta.  El hombre en su estado natural de Génesis era inocente; Dios no.  El hombre no conocía lo bueno y lo malo, pero Dios sí.  El hombre no era santo ni profano; Dios es santo.  El hombre era un alma viviente; Dios un espíritu vivificante. Como puedes ver claramente, el hombre de Génesis Capítulo dos NO ERA NI ES la imagen de Dios.  Esto es antes de la caída. Seguramente te preguntas: “¿Entonces qué pasa con Génesis 1:26-28?

(Génesis 1: 26-28)= Entonces dijo Dios: hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creo Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.¿No creó Dios al hombre a Su propia imagen?”.  Si lo hizo.  Pero este hombre creado es creado en Su corazón (mente divina o esfera espiritual), y no es el mismo hombre formado en el capítulo dos.

El capítulo uno es el producto terminado en la mente de Dios (Su modelo).  El hombre del capítulo dos es el principio del proyecto. No es hasta después de la caída, que el hombre empieza el proceso de muerte que finalmente lo llevará a Cristo, quien es la imagen expresada del Padre, y después colocar al hombre caído EN Cristo en donde entonces recibe la naturaleza de Dios.

(Hebreos 1:1-3)= Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo; el cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas (Todas las cosas) con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestro pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas. Una vez bautizado en la muerte de Cristo, el hombre es ahora transformado de gloria en gloria a la misma imagen de Dios.

No lo tomes con rigidez ni entidad de doctrina imperecedera; sólo medítalo y ve si es demasiado incoherente o si, por el contrario, tiene fundamentos más que suficientes como para considerarlo seriamente, partiendo de la base del texto que sigue: (2 Corintios 3:18) = Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor. Para que Dios pueda manifestarse o revelarse a sí mismo al hombre, necesitaba crear contrastes en los cuales Sus atributos y carácter pudieran ser entendidos.

Siempre sostuve, (Aún cuando todavía no conocía al Señor), que para saber si un libro era bueno, previamente había que haber leído una de esas tantas basuras literarias que andan dando vueltas por las librerías. Es el mismo principio. Un Dios santo, benevolente, resuelto, poderoso y rico, no puede ser entendido como tal sin un contexto contrastante de maldad, profanación, indiferencia, debilidad y pobreza. (Romanos 9:14-24) = ¿Qué, pues, diremos? ¿Qué hay injusticia en Dios? En ninguna manera. Pues a Moisés dice: Tendré misericordia del que yo tenga misericordia, y me compadeceré del que yo me compadezca.

Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia. Porque en la Escritura dice a Faraón: Para esto mismo te he levantado, para mostrar en ti mi poder, y para que mi nombre sea anunciado por toda la tierra. (Entérate: Dios fue quien levantó a Faraón. ¿Será posible? Sí, no seas religioso). De manera que de quien quiere, tiene misericordia, y al que quiere endurecer, endurece. Pero me dirás: ¿Por qué, pues, inculpa? Porque ¿Quién ha resistido a su voluntad? Mas antes, oh hombre, ¿Quién eres tú, para que alterques con Dios? ¿Dirá el vaso de barro al que lo formó: por qué me has hecho así? (Te está quedando claro, ¿Verdad?)

¿O no tiene potestad el alfarero sobre el barro, para hacer de la misma masa un vaso para honra y otro para deshonra? (Un vaso bueno y un vaso malo. Uno útil y el otro inservible. Hechos por el mismo alfarero). ¿Y que, si Dios, queriendo mostrar su ira y hacer notorio su poder, soportó con mucha paciencia los vasos de ira preparados para destrucción, y para hacer notorias las riquezas de su gloria, las mostró para con los vasos de misericordia que él preparó de antemano para gloria, a los cuales también ha llamado, esto es, a nosotros, no sólo los judíos, sino también de los gentiles? (Aprende. Esto no sólo corrobora lo que estamos viendo, sino que además destroza esa teología que enseña que los judíos serán salvos todos por decreto).

Para poder manifestar Su multiforme sabiduría debe haber una fuerza adversa que la trate de nulificar. Algo así como entender que Dios crea un adversario para poder mostrarnos a nosotros su poder para derrotarlo. Y luego nos enseña que nosotros, en su nombre, tenemos esa misma victoria. Pero nosotros nos asustamos, no le creemos y somos derrotados diariamente por un adversario ya vencido. Terrible. (Efesios 3:10) = …para que la multiforme sabiduría de Dios sea ahora dada a conocer por medio de la iglesia a los principados y potestades en los lugares celestiales. Las siguientes citas ayudan a entender este principio:

(Juan 1:3) = Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. (Una vez más: todas las cosas). (Salmo 139:12) = Aún las tinieblas no encubren de ti, y la noche resplandece como el día; lo mismo te son las tinieblas que la luz. (El salmista, que es David, le está hablando a Dios. Y le dice que a Él le es lo mismo las tinieblas que la luz. ¿Se entiende, ¿verdad? (Lucas 6:35) = Amad, pues, A vuestros enemigos, y haced bien, y prestad, no esperando de ello nada; y será vuestro galardón grande, y seréis hijos del Altísimo; porque él es benigno para con los ingratos y malos. (Dios es benigno para con los ingratos y malos. Su iglesia, ¿También?)

(Mateo 5:44-45) = Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir el sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos. (¿Me parece a mí o se nos dice que ciertas cosas, para Dios, no tienen el mismo color que para nosotros?) (1 Crónicas. 21:1) = Pero Satanás se levantó contra Israel, e incitó a David a que hiciese censo de Israel. (Curioso, pero en 2 Samuel 24 dice que fue Dios el que lo incitó a hacer ese censo. Pero si el censo resultó negativo, es evidente que nunca Dios lo llevaría a hacer algo así) (2 Samuel 24: 1) = Volvió a encenderse la ira de Jehová contra Israel, e incitó a David contra ellos a que dijese: Ve, haz un censo de Israel y de Judá. (¿Podría un Dios como el nuestro, por algo tan carnal como la ira, equivocarse así?)

(Éxodo 12:23) = Porque Jehová pasará hiriendo a los egipcios; y cuando vea la sangre en el dintel y en los dos postes, pasará Jehová aquella puerta, y no dejará entrar al heridor en vuestras casas para herir. (¿Quién dice que maneja a ese heridor? Dios.) (1 Corintios 10:10) = Ni murmuréis, como algunos de ellos murmuraron, y perecieron por el destructor. (¿Qué ocurrió con los que murmuraron contra Dios? El destructor los aniquiló). (Éxodo 12:12)= Pues yo pasaré aquella noche por la tierra de Egipto, y heriré a todo primogénito en la tierra de Egipto, así de los hombres como de las bestias; y ejecutaré mis juicios en todos los dioses de Egipto. (¿Quién está diciendo “yo haré”? Dios.)

(Génesis 3:4-5) = Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis; sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios. (¿Acaso mentía la serpiente? No del todo; tomó una verdad y la tergiversó sutilmente). (Génesis 3:22) = Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros, sabiendo el bien y el mal; (en eso, la serpiente no mintió); ahora, pues, que no alargue su mano, y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre. (El hombre inicial era eterno, en la caída perdió ese beneficio). También después de la creación del hombre en Génesis 1:26-28, las escrituras dicen que no había ningún hombre para trabajar la tierra (Génesis 2:1-5), y éste no fue formado en la tierra hasta el verso 7 del mismo capítulo. La pregunta que resta, es: ¿Quién es Satanás? La Palabra responde.

Cristo lo llamó asesino desde el principio (Juan 8:44) = Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso y padre de mentira. Juan en su epístola, dijo que peca desde el principio. (1 Juan 3:8-9)= El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo. Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios.

Nunca tuvo acceso legal al reino de la tierra (Salmo 24:1) = De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan. (Es cierto, Satanás no está mencionado ni siquiera como “socio” en la creación y propiedad). Fue creado como vaso de deshonra (Romanos 9:21) = ¿O no tiene potestad el alfarero sobre el barro, para hacer de la misma masa un vaso para honra y otro para deshonra?  (2 Timoteo 2:21)= Así que, si alguno se limpia de estas cosas, será instrumento para honra, santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra. (Aquí no lo dice pero queda implícito: ¿Qué ocurre con todo lo contrario? Sucede todo lo contrario…)

Derrotado por el juicio divino de Dios (Génesis 3:14-15) = Y Jehová Dios dijo a la serpiente: por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida. Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; esta te herirá en la cabeza, y tú la herirás en el calcañar. (¿Alguien vio a alguna serpiente comer polvo? ¡Y no me salgan con eso de que al comer insectos también comen tierra! ¿No será carnalidad lo que alimenta a esa serpiente?)

Derrotado por el misterio de la cruz (Juan 12:31) = Ahora es el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera. (Cuando la Biblia dice ahora, yo aprendí que eso significa: AHORA) (Colosenses 2:14-15) = …anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, quitándola de en medio y clavándola en la cruz, y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz. (Cuando un rey vencía en una batalla, exhibía al público los cuerpos o las cabezas de sus derrotados, como señal indiscutible de su victoria).

No es el adversario de Dios sino nuestro (Isaías 40:1-2) = Consolaos, consolaos, pueblo mío, dice vuestro Dios. Hablad al corazón de Jerusalén, decidles a voces que su tiempo es ya cumplido, que su pecado es perdonado; que doble ha recibido de la mano de Jehová por todos sus pecados. (La primera vez que oí esto, me impactó, pero no deja de ser real: Satanás es nuestro enemigo, no el enemigo de Dios. Dios no tiene enemigos, todo y todos se sujetan a su Majestad.) Es un impostor disfrazado de ángel de luz (2 Corintios 11:14) = Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. (¿Qué cosa es un ángel? Un mensajero. ¿Qué cosa es la luz? La Palabra de Dios revelada. ¿Un mensajero que finge dar Palabra de Dios revelada, adonde puedes encontrarlo? Aprende).

Ruge como león pero no es león (1 Pedro 5:8) = Sed sobrios, y velad, porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar. (Me enseñaron a ver en este verso dos cosas: el diablo no es un león, ruge como si lo fuera. El único león es el León de Judá, y ese no es el diablo. La otra, que anda alrededor, no metido dentro de tu vida. Si eres creyente, él no puede meterse en tu vida, entonces trata de perturbarte desde afuera, desde los alrededores).Su poder no es intrínseco sino reside en nuestra fe y concepto. “Lo que creemos determina la manera en que vivimos”.  Por ejemplo, el miedo a la muerte nos mantiene atados y cautivos, (Hebreos 2:14-15) = Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo, y librar a todos los que por el temor de la muerte estaban durante toda la vida sujetos a servidumbre. (El enemigo está destruido y nosotros liberados. De que lo creas o no, depende tu victoria o derrota diaria).

Él ha sido juzgado (Juan 12:31) = Ahora es el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera.  Sin embargo, nosotros podemos seguir siendo neutralizados por el concepto que tengamos de él (Romanos 6:16) = ¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia? (Pregunto: Algunos sometimientos “legales” que se dan dentro de la iglesia, ¿No tienen parentesco cercano con esto? Si tu respuesta es no, dame un argumento sólido desde la Biblia para aceptártelo)

A través de la doctrina él trata de asociarse con el adjetivo “Lucifer”, ¿Por qué?  Porque de esta manera es visto como un ángel de luz.  No lo es.  Incluso al tener este título él supuestamente nos hace respetarlo como el primer arcángel guardián del trono de Dios, líder de toda adoración divina y tercero en la jerarquía de la creación.  Si todo esto fuera verdad, entonces aún en su estado de caída (en la cual no pierde su poder, solo lo pervierte), se convertiría en un fuerte oponente en nuestra mentalidad.  Para que entonces sea magnificado ante los ojos de nuestro entendimiento y a la vez ante nosotros “La Imagen de Dios”, y así sentir es que necesitamos pelear contra él para derrotarlo.

Debido a esto nosotros algunas veces permanecemos derrotados mientras que damos gritos de victoria.  Es por eso que hemos relegado nuestra victoria a ser solamente espiritual sin ninguna manifestación práctica en esta dimensión física. Una mentalidad que crea excelentes cristianos, pero muy malos ciudadanos en la tierra. Cantamos de victorias que solo sentimos en la invención de nuestra imaginación cuando tenemos destellos de fe que resplandecen en nuestro corazón en medio de un grito corporal, pero que rápidamente se disipa mientras nos introducimos a lo que nuestra doctrina llama la realidad del príncipe de éste mundo.

La verdad es que Dios ha seguido diciendo por mucho tiempo: Mi pueblo pereció por falta de conocimiento. — No dejemos que con nosotros pase lo mismo, sino antes bien seamos una generación entendida de los tiempos de Dios, para poder colaborar con Él. Y no dejemos que malos y falsos conceptos de la religión nos aparten de la verdad, realidad, propósito y objetividad de Dios que tiene reservada para nuestro tiempo, y para manifestar en esta generación. Resplandece porque ha llegado tu luz; y recuerda que la tierra será llena del conocimiento de la gloria de Dios, y para participar en ello, necesitas cada día CONOCERLE MÁS.

Si hemos entendido correctamente el sentido básico de este trabajo, ya sabemos que no estamos minimizando la capacidad del adversario, sino ubicándolo en el lugar correcto que le pertenece, y no elevándolo a categorías de omnipotencia e invencibilidad que de ninguna manera posee. En cualquier actividad de la vida, especialmente en las deportivas que nos pueden servir de ejemplo, entrar en competencia sobredimensionando el talento rival y minimizando el nuestro, es disponerse a ser derrotado. Y eso es exactamente lo inverso a lo que Dios imaginó con nosotros en su Reino.

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mayo 19, 2024 Néstor Martínez