El diamante de hoy es hombre, adulto, padre y abuelo. No esgrime odios ni rencores, tampoco diatribas tendientes a descalificar lo que otros estén haciendo o no haciendo conforme a sus propios rudimentos o echando mano a los divinos. Esto es como decir que su testimonio no se erige en juicio a otros, sino en un auto examen muy profundo de lo que a él mismo le pueda estar faltando para estar a la altura de los requerimientos divinos. Si lo logra o no, será tu conclusión, lector, cuando llegues al final de su casi confesión.
No hace mucho alguien me dijo algo similar que tiene que ver con este dicho popular en respuesta a mi planteo a modo de conclusión sobre mis fracasos personales que iban desde lo familiar hasta lo espiritual.
En esa respuesta se enumeraban mis supuestas virtudes y aquellos ítems en los que debía trabajar para poder llegar teóricamente al entero que representaría el peso completo .
Esto abrió en mi ser una ventana para poder ver lo que Dios me estaba queriendo mostrar. Una y otra vez volvió a mi mente como un rompecabezas que solamente tenía un título, una imagen, una conclusión que estaba ahí, y que yo solamente debía plasmar por escrito. Y finalmente comencé a armar el rompecabezas.
Ahora bien, que » falte cinco para el peso» era bueno o malo? A priori lo que se deduce es la representación de una frustración que surge por «casi» tener el TODO y no lograrlo por muy poco. O sea: aquel sabor amargo a ser derrotado, llegando casi a la meta. ¿Esto solo me pasaba a mí? ¿O habrían más, que como parte de Reino de Dios, estarían pasando algo similar?
Dejando de lado las situaciones que tienen que ver con mi vida en el campo de lo almático, me he planteado en el mundo espiritual la alegoría del «peso», o sea lo completo con la » Plenitud de Cristo» y entonces dije: ¿Por qué siempre en toda mi vida sentí que cuando estaba a punto de llegar a esa plenitud por muy poquito (Aquí aparecerían los cinco que me faltaban), todo se frustraba? .Y ahí fue que vi el asunto desde otro lugar. Si el peso era la Plenitud de Cristo y siempre me faltaba » algo» para completar entonces la pregunta era: ¿Quien ponía esa diferencia? ¿La ponía yo con mi esfuerzo? ¿O la ponía Otro?…
Podría haber comenzado mi testimonio de Fruto Diamante contando mi largo y doloroso paso por la religión con todas las consecuencias terribles que tuvo en mi vida, pero es algo que ha sido descripto y plasmado en forma tan impecable por mis compañeros de milicia, que no es más que lo mismo que todos pasamos.
En Babilonia, en el mundo de la religión, sus miembros se «presentan» como portadores del «peso» completo, plenos, como con sus vidas resueltas mostrándonos lo mejores que son al lado nuestro (Cuando en realidad son sepulcros blanqueados, con un buen marketing pero carentes de esencia divina), y por el contrario todos aquellos que hemos sido apartados para el Reino de Dios nos hemos sentido que » nos faltaban cinco para el peso».
Y ese abismo entre ellos y nosotros es el que nos hacía ver como rebeldes, sediciosos, alborotadores, cuestionadores, desconformes con lo que veíamos, cuando en nuestro espíritu sentíamos y sabíamos que nos faltaban «cinco para el peso» y nos daba vergüenza, culpa, frustración, angustia, hasta que la libertad de Cristo vino a nuestra vida en distintos envases y momentos…y henos aqui!
Esta no es la página Web de Néstor Martínez !!! Esta es la manifestación de un cambio de Tiempos, una Bisagra que lo tiene a él como instrumento visible de un TODO en donde cada engranaje comenzó a ser acomodado en su lugar, aceitado, reparado, puesto a funcionar, con otras piezas en la estantería para comenzar a ser limpiadas para agregarse al funcionamiento de esta maquinaria que ya no se puede parar.
Los fariseos o religiosos de este tiempo, o sea los religiosos de siempre, han sido expuestos y su «peso completo» resultó ser FALSO. Aquellos que nos faltan «Cinco para el peso» hemos salido, otros están por salir, otros saliendo y otros van a salir de la religión, pero esos cinco que nos faltan no los ponemos nosotros, ni nuestro esfuerzo, ni Martínez, ni denominación alguna , esos cinco son la naturaleza caída del hombre Adán (que nos impide la Plenitud), lo que le faltaba al joven rico y que nos falta a todos.
Esos cinco son la Gracia de Dios por Jesucristo que Él pone para poder llegar a la» Plenitud en Cristo». Entonces: ¡Gloria a Dios por faltarme cinco para el peso! Ahora sé que debo pedirle a El que los ponga, aceptarlos, guardarlos y ya no preocuparme mas!
Este es mi testimonio no muy distinto al de cualquiera de mis compañeros y hermanos que tan bien graficaron su experiencia como Águilas juntándose al Cuerpo. Los bendigo y me bendicen!
Y así ha quedado dicho, con la expresión cargada de sinceridad y desprovista de necesidades figurativas personales, que tanto abundan en los ambientes relacionados con lo espiritual. Este diamante ha desplegado sus supuestas falencias, y ha evidenciado anhelar las virtudes que según su propia óptica le estarían faltando. El Señor, en su infinita misericordia y justicia será quien defina si es así como lo dice, o se minimiza. Ustedes harán el otro contrapeso de la idea, dejando entrever con lo que gusten expresar, si esto es así o le faltan esos cinco para el peso del título…
Néstor.-
Me encanto el testimonio de ese diamante, no tan solo por su sinceridad combinada con una buena dosis de naturalidad y transparencia, sino porque realmente ha dado en el clavo: a todos, al igual que el joven rico nos falta algo y por otro lado la buena obra que Dios empezó con nosotros sabemos que la terminará. Entonces ese edificio vivo que somos nosotros se sustenta como todo edificio con una piedra angular que es Jesucristo, fundamentada por los testigos originales y de primera mano que fueron los apostoles y acabada esa construcción con la misma piedra angular que da una forma final al edificio, cual si se tratase de la ultima pieza de un puzzle. Excelente diamante repito estoy convencido diste con el clavo o como tu mismo dices con el cinco que faltaba por el peso.
TOTALMENTE!!!!….que bueno que Dios pone palabras en unas bocas para que sus hijos entiendan lo que vivieron o en algunos casos aun viven….. gracias amados por traer viento fresco, brisa nueva a nuestras vidas…..ahora se que ese «cinco» que tanto me ha perseguido, dentro y fuera de babilonia, lo tiene y lo paga mi Señor!!!! Aleluya!!!!….me acabo de convertir en una feliz faltante de cinco!!!!….abrazo en Cristo Iglesia.